viernes, 31 de enero de 2014

VESTIDOS SILENCIOS




















La miraba con los ojos azules
de todos los días,
mientras la citaba el lamentable destino.

Siempre creí
que mis últimas horas
las compartiría con ella,
pero la muerte la visitaba lentamente
arrancando la miel de sus etéreos labios.

Sonreía
a través de ventanas sin vida,
al mismo tiempo que el alma perfilaba el lamento
de aquella torre con vistas azulinas.

Tú titubeaste
ante las consumidas pupilas
sembrando un -no me sueltes- en las manos,
en aquel instante una muchedumbre
bautizaba espacios vestidos
de penetrantes silencios.

Te busco y no te hallo
en el inquietante aire que respiro,
ahora,
la más triste velada rompe mi sueño
cuando proyectas frío sobre losas de piedad
en la pradera de tu voz
que fue mi delirio. 

miércoles, 29 de enero de 2014

DOS SOLEDADES














-Hube de sobrevolar un cósmico mar
más allá de todo límite de estrellas idílicas.
He atravesado los oleajes de los desalientos
y las desesperanzas,
y los inmensos jardines de la felicidad fatua,
pleno de sirenas de lenguas letales.
Hube de pasar todo eso y también
lo indescriptible para tan siquiera intuirte allí,
sentada en esa línea de horizonte
como un canto de lejanía quieta,
mansa como un edén.

- Y ahora,
que intuyes mi presencia,
que tus muros gritan de agonía
y las alas tintinean
en medio de sombras vivas.
Dime si soy la brisa venturosa
o simplemente los labios de la noche
con enterrados y desarmados violines.
Yo mientras,
cerraré las puertas al olvido
desataré las lianas para estar contigo,
ya que el color de mi sueño
se blanquea entre la mitad de tu existencia.

-Suelto mis amarras, me libero
de los espejismos y de las esperas pacientes.
Me suelto a la dulce y pecaminosa senda por donde me llegas,
por donde la sensación de tu existencia se pone roja,
escarlata de ansiedad e impaciencia.
Me vuelvo una flecha con destino infalible
desde mi eternidad hacia tu infinito.
He de ensartar en la soledad a ti adherida
sin matarla...
Tú, tú y ella me han de olfatear,
juzgar si mi aroma les sabe a casual lobo hambriento del camino
o a macho huérfano de guarida,
de eternidad de a dos.

-Tú,
mi dulce espera
huérfano de collares desconocidos
y de pies con lágrimas siniestras.
¿Acaso no viste mi mundo,
y lo que te espera?
Piel sin abrigo,
silencios perforados
con espinas de euforia.
Tal vez,
el dolor me sostenga con sus ojos
y el centro de mi vida sea morirme,
sin tocarte…

Autores: Alex Peruzzi y Silvia Savall

ORIGEN



















Como el jugo del agua clara
y su tempestad salpicada de certezas,
despeiné a la indiferencia
con el origen de mi alegría.

Tiemblo en el calor
cuando me apego a la ternura
de unos ojos con sabor a timidez,
los míos,
calma cubierta de ansias
esa que incita a morir lentamente
sobre la pasión sin ley de tus labios.

sábado, 25 de enero de 2014

SUTILMENTE





















Degusto
los caprichos del aliento
que excitan la ternura con los besos,
encendiendo las llamas del infierno.

Silencié
tu boca con la suavidad de mi lengua,
mientras tus manos provocaban
la desesperación en los sentidos.

Un gemido
en los senos impacientes
podrían ser descubiertos por un terso aliento, 
que sutilmente acariciaban la oscuridad del pensamiento.

Y atraviesas
las marismas de mi cuello,
cuando la espalda se columpia bajo tus dedos,
dedos que lamían la profundidad del sexo.

Déjame caer
sobre la abertura del labio,
al mismo tiempo que me deslice sobre tu piel,
mi piel,
en el mar desprendido sobre dos cuerpos.



Poema finalista y con mención de honor en lV Concurso Internacional de Poesia Atiniense 
Atina Argentina 2013.

NI PIEL NI NOMBRE














Mis manos,
mis diminutas manos
vacantes de caricias,
de tu piel sin nombre.

Te has marchado por los laberintos de la ruina
hacia ásperas sienes,
condenándome penas amarradas a la nada
a la par noches sin senos que me sujeten.

¿Dónde está la mirada fecunda y el sol de las mañanas?
Rayos de miedo,
bolsillos sin risas,
y el alma,
¡ay mi alma!
tan apretada sobre la diáfana libertad sin vida.

Y me engendraste entre jirones azules
mientras imploro ojos de piedad sobre tu mente.
Hombros sin abrazos,
palabras vivas en la sordomuda soledad
en el momento que se escaparon las ganas
de seguir amándome .

Mis manos,
no tienen piel,
ni nombre.

jueves, 23 de enero de 2014

UNA VIDA













Era una tarde gris, donde las hojas caían rendidas bajo mis pies y la tristeza del paraje mostraba ese color plomizo. Sentada en el banco de aquel parque, el frío se apoderaba de mis huesos ya casi muertos por el hambre; pero no me importaba, ya que el alma estaba desgastada por los tropiezos de una vida sin impulso, sin valor para seguir adelante.
Todo era nada, ni el más breve recuerdo me hacía suspirar, ni siquiera la sonrisa de aquel niño que había visto tiempo atrás jugando en la calle. Me hermanaba a la soledad y a su silencio como acostumbraba hacerlo con mi canción favorita, ésa que deja en tu juventud un hilo de risa en los labios.
Quise soñar tantas veces con sus manos, con el pelo enroscado entre mis dedos y sus mejillas sobre las mías. De pronto, el imperecedero sueño se borraba entre perdurables y cenicientas tristezas. La vida no me había regalado una niñez maravillosa, ni una familia que me quisiera tanto como yo a ellos, siempre fui huérfana de padre y madre incluso antes que me abandonaran.
Ahora, después de un puñado de años de existencia, me rindo ante el suceso que me ahoga. Quizás mañana cuando despierte, pueda descubrir nuevas raíces donde agarrarme sin miedo.




lunes, 20 de enero de 2014

LÁGRIMAS EN LA TARDE




















Yo sé
que en mi pecho
te quedaste
ahí,
tan quieto,
pero me hace falta tu voz quebrada
esa voz que me dice que no te has ido.

Y podría pensarte,
haber deseado en las lágrimas de la tarde
un beso enloquecido sobre mi carne,
sin embargo,
no estabas aquí,
aquí presente entre la piel.

sábado, 18 de enero de 2014

UNOS MINUTOS DE VIDA











Al alba mi voz más callada resuena
entre gigantescas moradas de tormento.

Permíteme que sea mi yo
más desnudo,
ya que el nefasto ensueño
hoy me concede unos minutos de vida.

No sé si el calvario de tu dicha
será perenne,
o la ligereza de las manos se pierda
en un perpetuo frasco vacío.

Aunque anteriormente morí
bajo el grito de la hiel,
tras el veneno del suplicio
y sus inagotables favores.

Ahora,
después de destinos sin futuro,
entrégame unos segundos
para que pueda vivir lentamente,
sobre el acorde apasionado de tus dedos.

Al alba,
mi voz más callada,
resuena entre mis cruces.

jueves, 16 de enero de 2014

INVIERNO















No creas que voy arrastrarme
ante los ejércitos blancos,
ni al frío de la sombra
que se levanta con puños abiertos para envolverme.

Quizás mi fatiga imparable se rinda
antes que los tambores resuenen en los oídos,
y las ondas de tu pelo sean incienso
en las esquinas de la muerte.

No hay duda que te veo a distancia,
tan lejos,
que el triunfo de las manos se consume
sobre mi ceguera,
ésta que desamándote ama
las guirnaldas de las primaveras.

lunes, 13 de enero de 2014

ANTE LA BRISA


Vengo con el alma desnuda
ésa que con tu presencia se solidifica,
a través de entregadas miradas abiertas.

Llevo de norte a sur mis alas sencillas,
sin sorpresas disfrazadas,
y dentro un destino de rosa marfil
con hilos tensos,
bordados en nácar.

Te visto con mi piel,
con abrazos sin espinas,
sin lluvia en los umbrales de la tristeza
cuando me pierdo en el tic tac de tus entrañas.

No me apresan  las noches con su silencio,
ni las ruinas del alba
porque iluminas el fondo de mis sinsabores,
y las canas de la nostalgia.

¿Qué soy si tú no mencionas te amo?
¿Qué soy si tu voz no habla cuando cierro mis ojos?
Soy el espejo roto que siente frío
bajo losas sin piedad.

Vengo con aroma de hojas verdes,
con el dolor limpio sobre las ramas,
vengo desnuda ante la brisa,
la brisa virgen de tu mirada.

domingo, 12 de enero de 2014

HERENCIAS











Aquella estrella de túnica blanquecina
acaparaba toda la atención,
¡cuánto me hubiera gustado vivir de esa manera!
Delante  de mí los secretos acostumbraban a reírse
salpicando peldaños en vidas nauseabundas.

Quise disipar las agrias luciérnagas
al mismo tiempo que visitaban el recinto,
estrujarlas con dedos de cuervo
mas ella en su trono postulaba
sobre pasos perecederos,
a la par que inseguros.

Era conocida por sus menudencias
como  fulana de aquella acera.
Realmente las vísceras  del alma
eran botellas de absenta
sobre  parturientas penas.

Ningún lenguaje percibía suplicios,
ni  la navaja arqueada a su metódico rito.
Desde entonces,
la sed es maestra en ondas ermitañas
cuando la piel ahonda,
desgarra y llora,
bajo el infierno de una humilde herencia. 


jueves, 9 de enero de 2014

DÉJAME
















Te espero
en  translúcidas promesas,
en el alma  blanca
cuando el rocío se acuesta,
entre tanto, déjame,
déjame que te calle con mi voz.

Déjame que la tierra de mis pies te acompañe
cuando perfilen la ausencia destiñendo tus labios.
Y sobre el alba, déjame adorar la boca
para poder fraguar una sed clara,
clara como espejos de agua.

Déjame sobre la hierba mojada de los ojos
en primaveras verdes y florecidas,
también, en rincones tensos,
oscuros,
rincones, que pueda ser dormidos con las manos.

Déjame que en la imaginación sea tu aurora,
tu peldaño en las esquinas desiertas
cuando el terror sea el verdugo
hacia  noches petrificadas y austeras.

Déjame callarte entre frío y calor
destilando azúcar por futuras memorias,
así me sentirás en la tibieza del aire
con suspiros de pluma,
cuando te abrigue y mi voz te calle.







martes, 7 de enero de 2014

PARA QUE TU ME LEAS



















Para que tú me leas,
entre oprimidas madrugadas
y párpados indecisos
sería capaz de bajar la mirada,
rendirme ante el desmesurado dolor
que me doblega.

Mi credo,
no se pierde en el cuenco de mis ojos
sino que emerge arrullando los labios,
mientras sentencias con plomo
las palabras blancas que delatan
besos sobre rudas manos.

Pero tu rostro
marca distancias largas,
cuando mi voz sosegada
camina con pasos cortos,
y tú,
sigues sin decir  nada.

Para que tú me leas,
entre laberintos dormidos
y consentidos desvelos,
sería  arena en los pies,
el vientre del seno,
la caricia que te vistiera.

Solo,
para que tú me leas.





sábado, 4 de enero de 2014

ANTE TI, ANTE MÍ













Ahora,
en estos segundos de mi vida
me dejo arrastrar
porque las ganas me pierden.

Vivo sobre las líneas curvas del cuerpo
e imagino esa imagen,
en la que tú eres la caricia
y yo la libertad suspendida bajo los dedos.

Ante ti,
ante mí,
desnudo el placer entre pozos sin tregua,
no pretendo retrasar mi lengua sobre tu vientre,
ni postergar labios a través de los pliegues.

Desciende sobre el anónimo torso,
sobre la anónima nuca,
ésta que te exculpa  
de tus candentes  locuras.

Vivo sobre tus ganas.



jueves, 2 de enero de 2014

LLÁMAME














Me has llamado,
y aquí estoy,
cuando las lágrimas te han besado,
donde el olvido te hizo daño,
aquí estoy.

Te sostengo en mi alma
que respira por las dos.

Los sueños han atrapado tu memoria,
y has muerto de amor y desamor
mientras la vida fue suspiro,
lucha contra el corazón.

Me has llamado,
aquí estoy.